sábado, 29 de julio de 2017

Capítulo 13

-Basta! Gackt déjalo ahora mismo! Déjalo!- como pudo apartó a Camui del otro quien sangraba profusamente doliéndose en el piso.

-Tu y yo tenemos una conversación pendiente…- dijo el solista acomodándose el cabello y la ropa, aunque las costillas le dolían por como lo había pateado Kaz.

Hyde no contestó se mantuvo mirando al piso temblando ligeramente. Cuando Camui hubo abandonado el estudio Hyde se dejó caer de rodillas junto a Kaz

-Estas bien?- le preguntó pasándole una mano por el cabello.

-Sí…estoy bien…- dijo limpiándose la nariz con la mano, pero Hyde se inclinó y le limpió con una servilleta que había guardado en su pantalón a la hora del almuerzo.

-Gracias…

-Porque?

-Por defenderme Kaz-chan…

-Bueno yo…

-Shsss, vamos a tu casa y te ayudo a detener esa sangre?- sonrió

-Vamos…

Kaz se dio un baño mientras Hyde le preparaba la cena. Cuando salió de la ducha fue a buscarle a la cocina, se veía tan lindo en ese delantal blanco moviéndose de aquí hacia allá entre la estufa y el refrigerador.

Gackt era muy afortunado al tenerle, no entendía como desperdiciaba a una persona como Hyde…

-Ah! Kaz-chan, te hizo sentir mejor la ducha?

-Si, me relajó los músculos

-Bien, siéntate, yo sirvo la cena- Kaz se sentía muy feliz, a pesar del dolor de los golpes de Gackt, tener a Hyde en su casa, preparándole la cena, hablándole con esa dulzura que el vocalista no hacía notar a todos…

Se sentó y esperó pacientemente a Hyde le pusiera su plato de arroz y carne con verduras.

-Bueno, creo que eres una muy buena ama de casa- dijo en broma tomando un pedazo de carne con los palillos.

-Lo se! También puedo planchar y lavar aunque claro, no es algo que me guste hacer así que ni te emociones!

-Jajajaja- el guitarrista había pensado que luego del beso que se dieron la relación entre ellos estaría rara e incomoda. Pero nada de eso pasó, Hyde actuaba como si no hubiese ocurrido.

Kaz pensó que Hyde se iría a su hogar temprano para arreglar la situación con Gackt, pero no, a las 11 de la noche hizo palomas de maíz en el microondas y las llevó a la habitación, distendiendo la cama y acomodando los cojines

-Veamos una película!- le dio un platón con las palomitas y de entre su colección de películas se puso a buscar una. De repente se rió y mostrándole un dvd donde en la portada salían dos chicas de pechos grandes, dijo: veamos esta!!

-Oh vamos Hyde! Ese tipo de películas es para que las veas solo!

-Porque? Si la vemos juntos podrías intercambiar comentarios de cual tiene mejores tetas y eso.

-Basta! No pongas eso

-Ya! Esta bien, entonces…esta!

Horas mas tarde Kaz había terminado durmiéndose, todo porque Hyde luego de la película dijo que no podía dormir y apagando todas las luces se puso a cantar en susurros The Cape of Storms, la voz suave y acompasada de Takarai, le hizo caer a un estado profundo de tranquilidad. Aunado a eso el hecho de que los dedos de Hyde se deslizaban por su mejilla herida…

- But every dream has its time...to die...- cuando notó a Kaz finalmente dormido se hizo ovillo en un costado de la cama y dejó que todas sus lágrimas fluyeras.

Se sentía tan confundido, como si todos sus sentimientos fueran un remolino arrastrandole consigo. No entendía en primer caso porque había besado a Kaz y, el hecho de que este se lo hubiera correspondido le tenía aun más preocupado. Pensó que saldría a resumir el tema en la cena pero Kaz no dijo nada y el prefirió tampoco sacarlo a relucir. Quizás le había besado por pura curiosidad…y pensar en eso de alguna manera le dolía a Hyde ¿Por qué sentía que le era necesario que Kaz le amara? Se tocó los labios recordando la calidez del beso…la ternura impresa…

Pero entonces asaltó su mente otro problema: Gackt.

Ahora con que cara se presentaría ante él? Le perdonaría? Tenía miedo de perderle…y al mismo sentía que su relación estaba ya dañada, y sino hacían algo para mejorarla terminaría yéndose al caño.

Continuó despierto y llorando por un largo rato, aferrando las manos a las sabanas para no hacer ruido, hasta que cerca de las 4 de la mañana el sueño le venció.


Y ahí estaba el rockstar que miles de personas amaban. Aquel que bajo los reflectores de las cámaras parecía un ente perfecto, mitad hombre mitad mujer, coronado por el talento, la belleza y la gracia.

Y ahí estaba él, sentado en pants sobre su sofá, con el cabello despeinado, la almohada aun marcada en la mejilla, taza de café a la mano, cigarro y jugando Resident Evil como endemoniado.
Se había levanto a eso de las 3 de la tarde, pidiéndole le hiciera el desayuno mientras el continuaba enredado en las sabanas “descansando los ojos”.

Kaz hizo cada cosa que Hyde le pidió, hasta le preparó el baño solo que el vocalista se rehúso a ducharse.
Llevaba horas frente al televisor jugando, el guitarrista no quería perturbarlo pero no podía dejar de preocuparse por toda la situación de trasfondo que había entre los dos…o tres…si contaba a Gackt.

Un día estuvo bien, dos le parecieron raros, pero tres…tres días de tener a Hyde en su casa, como si nada, ya era exagerada rareza.

Hyde ni mencionaba a Gackt ni sus intensiones por hablar con él, mantenía el celular apagado y usó su teléfono de casa para llamar a sus amigos más cercanos y decirles donde estaba.

Había incluso aplazado un par de compromisos de trabajo y parecía que se relajaba de maravilla en casa de Kaz.

Se levantaba tarde pero se dormía de madrugada, se mantenía viendo películas y manipulando al guitarrista para que las viera con él, o jugaran cartas, videojuegos y hasta lo hacía cantar con él bebiendo cerveza a altas horas de la noche.

En dos ocasiones el portero les pidió bajar el volumen de la música un martes a las 2 de la madrugada ya que Hyde se le había ocurrido comprar un disco de Marilyn Manson y ponerlo al máximo sonido.

-Ah…muero de sueño…- Jueves 4 de la tarde, Hyde salía de la pieza sin camisa, estirándose como un gato y tallándose los ojos. Kaz había pasado toda la mañana componiendo canciones, contestando algunas preguntas que varias revistas les habían enviado y atendiendo el teléfono que en su mayoría eran para Hyde, desde el productor, el manager, el staff, la gente del sello discográfico, Ken preguntando si ahora Hyde se acostaba con él, Tetsu recomendándole como hacerle salir de las depresiones, Yukkie preguntando por su bienestar, Sakura insistiendo que si era necesario ir y golpear a Gackt él le ayudaba.

-Hyde…que harás hoy?- le preguntó en cuanto vio como se desperezaba y se servía un vaso de jugo.

-Terminar Donkey Kong

-Y luego?

-Probablemente bañarme, ver una película, cocinar algo para comer, leer lo que me falta del libro de Harry Potter y no se…quizás luego retome Resident Evil.

-Ya veo…y…cuando en tus ocupados planes tienes pensado ir a tu casa y hablar con Gackt?- Hyde bebió el jugo de un solo trago y como un felino coqueto moviéndose ágilmente fue a sentarse a su lado en el sillón.

-Quieres que me vaya?...- hizo un puchero tan tierno que Kaz solo pudo sonreír

-No lo se, por eso te pregunto.

-No quiero!! Yo deseo quedarme aquí…contigo…

Kaz sintió que su corazón se desbocaba, y tragó saliva.

-De verdad?

-Sí…contigo me siento seguro y sin preocupaciones- sonrió y Kaz no tuvo otra opción más que dejarle hacer lo que quisiera.