sábado, 29 de julio de 2017

Capítulo 10

Camino a un ameno restaurante en Shibuya, Hyde cantaba Love Addict, su primer single mientras movía la cabeza. Kaz le miraba sonriendo, Hyde era tan perfecto. Y no porque no tuviera defectos, sino al contrario, los tenía como todo ser humano pero incluso esos defectos le hacían encantador y adictivo.

Kaz llegó a pensar que si Hyde no fuera caprichoso, manipulador, despreocupado, travieso, a veces maldito, frío y calculador, entonces no le amaría…

-Kaz!! Cuidado con el perro!!!- todos los pensamientos del hombre se detuvieron para esquivar el supuesto canino…pero no había ninguno y solo frenó ferozmente ante la risa de Hyde

-Jajajajaj siempre caes!

-No es gracioso! Mis llantas se joderan por tu culpa!

-Vamos Kaz! Ten un poquito más de humor.

-Lo tengo, siempre lo tengo.

A esas horas el costoso restaurante estaba semi solitario, lo que les permitió gozar de un momento de intimidad.

Hyde movía los pies impacientemente bajo la mesa dándole algunos puntapiés a Kaz mientras esperaban dos tazas de capuchino de vainilla y donas glaseadas.

De tema en tema tocaron uno que había tenido realmente preocupado al vocalista. Riéndose, Hyde dijo:

-Puedes creer, Kaz-chan, que por un momento pensé que habíamos tenido sexo? 

-Eso es porque todo el día piensas en eso

-Mentira! Solo cuando veo un tipo sexy- Kaz se rió agitándole el cabello- sabes? Que tonto fue de mi parte creer que quizás estabas enamorado de mi- liberó una sonora carcajada.

Pero los ojos de Kaz se ensombrecieron…intentó sonreír, se esforzó mucho, aunque apenas si logró una sonrisa fingida.

-Kaz-chan?- Hyde le miró atentamente, había esperado que se riera con él y soltara algún comentario chistoso al respecto pero aquella mirada triste y esa sonrisa irreal le preocupó.

El guitarrista se dio cuenta de su error, por pequeñeces así Hyde podría darse cuenta de sus sentimientos y entonces toda su amistad se iría al carajo.

-Jajajaja como ibas a creer eso?! Que idiota, Hyde, no me gustan los hombres con barba.

-Pero yo no tengo barba!!.

-Si tienes! Desde aquí te veo los pelitos.

-Mentira! Si me rasure con rayos X, sabes lo que cuesta eso?!

-Pues te engañaron

-No es cierto!- Hyde pataleó bajo la mesa como un niño pequeño y Kaz se rió olvidándose de la tensión que hace unos momentos se había creado.

Pasaron todo el día juntos, primero porque luego del desayuno el vocalista le pidió no le dejara solo y le acompañara a hacer las compras de la semana. Después porque le dijo que se aburriría pasando la tarde encerrado en su departamento y le invitó a jugar Resident Evil y, ya estando ahí de una vez se ofreció a hacer la cena para él.
Kaz, de alguna manera se sentía ilusionado. Permitiéndose vivir esos momentos como si Gackt no existiera y Hyde fuera totalmente suyo…solo suyo…

Hyde movía el lápiz frente a él, mirándolo como si este le hipnotizara. Llevaba media hora intentando escribir una nueva letra, pero no podía concentrarse debidamente. Tenía días pensando en Kaz…

En un punto especificó sobre él: la melancolía que desdibujó sus facciones cuando le mencionó la posibilidad de estar enamorado de él.

Y si lo estaba? Sería por eso que sus ojos se nublaron? Que haría él en esa situación? Kaz era un encanto de hombre, seguro que a cualquier chica y hasta chico le atraería, era bien parecido, simpático, agradable, amable, tomarle cariño era cosa fácil.
Pero era solo su amigo…y Gackt…¿el amor de su vida?

Por años Hyde creyó eso, ahora no estaba seguro, después de todo el solista últimamente apenas y si le ponía atención; el amor y la amistad, creía Hyde eran de esas cosas que no deben descuidarse, porque pierden su brillo y mueren.




Mientras tanto, Gackt caminaba por las calurosas calles de China, con lentes de sol y gorra tratando de pasar inadvertido. A su lado, un hombre de baja estatura y cabello al hombro negro, le seguía el paso.

-Gackt mira! Me compras eso?- habló aquel chico haciendo un gesto tierno con los labios y el alto cantante no pudo resistirse al encanto de esa carita.

-Esta bien, Masa.