martes, 5 de septiembre de 2017
Capítulo 2: Palabras
Le pesaba la mirada ajena, tranquilamente podría
haber jurado que Hyde llevaba mirándolo fijamente más de 10 minutos:
-… sé que siempre te gusté mucho pero me
vas a terminar ojeando- bromeó dejando de lado el libro que estaba leyendo.
-Lo siento. Me perdí en tu amplia frente-
mordió una de las tostadas.
-¿Qué pasa?-
-Estaba pensando…- habló con la boca llena-
Que me gustaría mostrarte algo y que me dieses tu opinión-
-¿Sobre qué?-
-Arreglos-
-Ya hablamos de-…-
-Son solo letras, no seas quejoso- Sakura
alzó una ceja curioso.
Hyde nunca, en los más de 15 años que
llevaba conociéndolo, le había mostrado sus letras. Fuese por A o por B nunca
lo hacía:
-¿Y por qué de pronto quieres mostrarme tus
letras?- sonrió curioso apoyando el mentón en una de sus manos. El otro movió
los ojos hacia los costados, arriba, abajo, a sus tostadas, mordió la cara
interna de sus mejillas y finalmente suspiró.
-Necesito una opinión diferente, algo más…-
hizo gesto de buscar la palabra indicada en su mente- Rarito. Como tú- le
sonrió.
Sakura volvió a tomar el libro:
-¿Te ofendiste?- masculló terminando de
comer sus tostadas.
-¿Por qué lo haría?-
-¿Entonces sí?- preguntó ansioso.
-No dije que sí- Hyde rodó los ojos- Pero
lo pensaré-
-No tengo toda la vida para esto, ¿sí o
no?- se levantó a dejar la taza vacía en el fregadero.
Sakura se tomó el tiempo para leer una
última carilla antes de responder:
-Está bien- Hyde sonrió.
Escuchó los pasos de su compañero pasar
rápidamente desde la cocina hasta la habitación y de la habitación nuevamente
hacia donde estaban sentados:
-Tóma, está marcado- señaló el marca páginas.
-¿Tenías todo listo?- rió.
-Por las dudas- se colocó el saco y una
bufanda- Volveré en la noche, cuanto más rápido termines, mejor- le guiñó un
ojo.
-Pretencioso- bufó.
-¡Nos vemos!-
-Espera, ¿qué se supone qué quieres que
ha-…?- portazo. Suspiró.
Un poco dudoso tomó el cuaderno y lo abrió
en la página marcada. La letra estaba escrita con una caligrafía no muy linda
para ser de él, incluso le costó entenderlo. Aunque no solo por la caligrafía:
-Agh…- se quejó.
¿Por qué tenía que hacerlo de esa forma?
Siempre había amado la capacidad de Hyde
para componer de forma tan poética pero, ¿y qué se suponía que debía hacer él
con ello ahora? Para colmo se había ido sin dejarle instrucciones o al menos
una vaga idea de qué quería.
Hizo el cuaderno a un costado y pasó a
sentarse en el sofá a encender el televisor. Ya tendría toda la tarde para
pensarlo.
_________
-¿Cuántas veces te he dicho que no me gusta
que me llames en horario de trabajo?- dijo molesto.
-Dime qué quieres que haga con esto- pero
más molesto sonaba Sakura que, después de haber pasado unas 4hs pensando, aún
no lograba entender qué hacer. Lo escuchó reír ligeramente.
-No creí que te fuese a dar tantos
problemas-
-Me dará un derrame cerebral-
-Ay que exagerado-
-Te escucho-
-Solo escríbelo como lo harías a tu forma-
-¿Lo dices en serio?-
-Ajá. Necesito algo que suene más como tú y
menos como yo-
-¿Por qué?- cuestionó extrañado.
-Oh, pero no es lo que piensas. No me
refiero a que deformes el sentido de ella sino que… se lea como si no la
hubiese escrito yo-
-… Creo que entendí…-
-Eso espero porque debo colgar. ¡Suerte!-
-Adiós-
Cortó.
Inmediatamente se levantó del sofá, apagó
el televisor, tomó el cuaderno nuevamente y buscó una birome:
-Bien…- encendió un cigarrillo antes de
comenzar a escribir.
___________
-¿Y?- entró apresurado sacándose los
abrigos de un tirón- ¿Cómo te fue?-
-No lo sé, dime tú- acababa de encender
otro cigarrillo.
Le extendió el cuaderno y con ansias el
vocalista rápidamente le dio una ojeada:
-Espero te refirieras a eso, porque sino no
tengo idea de qué más hacer-
Lo observó releer el papel una vez más y
asentir:
-Me gusta tu forma de expresar las cosas
“de forma justa”. Quería algo más concreto y no tan abstracto. Más como tú y
menos como yo- cerró el cuaderno- Me alegra saber que 15 años no fueron un
desperdicio, realmente entiendes mis escritos-
Ambos rieron:
-¿En serio creíste que no sería capaz de
descifrarte? – Hyde solo alzó los hombros con gesto divertido- Que tonto eres a
veces-
-¿Cenamos?-
-Merezco que me lleves a cenar de hecho-
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