lunes, 31 de julio de 2017
domingo, 30 de julio de 2017
sábado, 29 de julio de 2017
Capítulo 15
-Bueno y
a todo esto, en vez de estar discutiendo conmigo de eso, deberías ir ya a tu casa y hablar con Gackt- se quitó las piernas de Hyde de encima.
-No! Yo no quiero volver ahí, estoy muy bien aquí contigo!!- Kaz se puso de pie, no quería escuchar de nuevo a Hyde diciendo cosas que sabía no eran verdad, ilusionándole en vano, haciéndole sentir el hombre mas feliz del mundo y al mismo tiempo el mas desdichado. Quería descansar de eso, de creerse importante y no ser nada
-No, sabes? No me molesta que estés aquí, por mi esta bien pero antes quiero que vayas y hables con Camui, ustedes tiene muchas cosas pendientes- le tomó del brazo y le levantó del sillón
-Si, pero no quiero hablarlo ahora, Kaz!!- el músico lo conducía a la puerta, jalando de él
-Vamos, ve y platícalo y cuando este todo bien puedes regresar, anda, anda
-Digamos que temporalmente, sí- cerró la puerta en la cara del vocalista. Este se puso a gritar como histérico golpeando la puerta e intentando abrirla, hasta que media hora después Kaz dejó de escuchar todo ese alboroto.
Hyde le había dado ya mas de cinco vueltas a la manzana de la casa que solía compartir con Gackt, entre que se decidía a bajar y no. No sabía que iba a decirle y pensaba que Gackt aun estaría lo bastante molesto así que ya se esperaba una discusión espectacular.
Finalmente estacionó poco convencido.
El auto de Gackt estaba aparcado por lo tanto concluyo que este estaba en casa. Entró sigilosamente muy nervioso, mientras se frotaba las manos.
Iba pensando como iniciar, quizás con un discúlpame. La sala estaba en calma, y la cocina y los pasillos cercanos también. Observó el reloj, no era tan temprano pero si Gackt había trabajado toda la noche como a veces hacía, entonces estaría durmiendo. Caminó hacia la habitación que por muchos años habían compartido y que, siempre había sido un lugar agradable para Hyde, un refugio. La puerta estaba entreabierta así que con un leve empujón se abrió por completo.
Su cuerpo se tensó, su quijada sobre todo se apretó hasta doler, sintió que el piso se le movía y tuvo que sostenerse de la pared para no caer como un bulto.
Ahí estaba él, en la cama que habían elegido juntos cuando Hyde se mudó a esa casa, en esa cama que para él era sagrada, su vínculo, sus momentos tranquilos y apasionados.
Ahí estaba Gackt, desnudo, cubriendo con su cuerpo el de otro hombre, besándole como Hyde pensaba solo podía besarle él, y ese hombre, esa persona que retozaba con Gackt sobre su cama, no era otro más que Masa
Fue este el primero en percatarse de su presencia y quien con una mirada desafiante le confirmó lo que Hyde temía, Camui y él eran amantes desde hace mucho tiempo.
-Hyde!- escuchó su nombre en voz del solista cuando daba la vuelta pesadamente en sus talones e intentaba escapar de la escena como un animal herido de muerte, casi arrastrando su cuerpo débil.
-Hyde yo lo siento, esto que viste paso porque yo estaba molesto por lo de Kaz! Pero - Gackt sintió que la sangre se le helaba y su corazón se desbordaba a sus pies, no había cosa más triste que ver a Hyde llorar.
Con ese rostro lindo, sus mejillas rojas humedecías en lágrimas, sus ojos de avellana tan cristalinos como dos piscinas profundas de agua limpia, mordiéndose el labio inferior como para contenerse, sollozando, incapaz de articular palabra.
Gackt le abrazó sintiéndose el ser más despreciable de la Tierra.
-Lo lamento H\tyde - el vocalista le apartó lento
-Gackt no quiero hablar contigo ahora por favor - en la sala apareció Masa usando la camisa de Camui y observando la escena con deleite. Hyde le miró de soslayo sintiendo como seguían cayendo pedazos de su corazón.
-Lo entiendo - como pudo Takarai se limpió las lágrimas y con la dignidad que aun le quedaba salió de la casa, subió a su auto intentando no pensar
Kaz terminaba de ordenar su departamento. Vivir con Hyde era el cielo y el infierno a la vez, a veces podía ser muy desorganizado. Cuando acomodaba la ropa pequeña del otro en el closet no pudo contenerse de acercarse una de las camisas de Hyde a su nariz y olerla. Le gustaba ese aroma dulce y fresco a la vez, cerró los ojos y se saboreó de nuevo aquel beso de menta y la calida sensación de recibirlo.
El timbre del interfon comenzó a sonar una y otra vez, como si alguien lo mantuviera oprimido, Kazuhito odiaba cuando la gente hacía eso; algo molesto levantó el auricular.
-Quien es?
-Kaz-chan - esa voz
-Hyde? Ya hablaste con Camui? Porque sino no te dejaré entrar, y no presiones el botón como loco!
-Kaz-chan - la voz sollozó lastimosamente
-Puedo entrar por favor?- el guitarrista se preocupó mucho y le dejó pasar. Esperó impaciente junto a la puerta a que Hyde abordara el elevador y llegara al departamento. Y si Gackt le había pegado? No se lo perdonaría, sacaría fuerzas de donde fuera pero no se lo perdonaría.
Entonces Hyde llamó a la puerta débilmente y Kaz abrió sin perder tiempo. Lo que vio le partió el corazón. Hasta ahora nunca había visto llorar a Takarai y la verdad es que no quería verlo de nuevo, era una escena muy conmovedora.
Parecía un niño pequeño extraviado de la mano de su madre, tan vulnerable, sus lágrimas cayendo en cascada, sus ojos ardiendo en tristeza, Kaz quiso preguntar que había pasado pero su cuerpo actuó antes que su boca, y sin pensarlo más se acercó para recibirlo en un fuerte abrazo. Le estrechó fuerte, lo suficientemente fuerte para hacerle sentir acompa
-Lo se
-Kaz se que te he dado tantas molestias ya, y estoy agradecido de que a pesar de todo me soportes, sin ti no se que haría
-No digas eso, nunca me darás molestias- le acarició el rostro tiernamente.
-Hoy cuando duerma podrías abrazarme fuerte, como hace un momento?- preguntó en un hilo de voz.
-Por supuesto - esa tarde pasó tan rápida, Hyde se fue directo a la cama y le pidió a Kaz que le dejara solo un rato, este aprovecho para intentar cocinar la comida favorita del vocalista.
Al anochecer se acostó junto a él, con la habitación en penumbras y en silencio. Los ojos de Hyde tristes y cristalinos destellaban ante él. Kaz no habló, no hubo necesidad, solo le abrazó, dejando que este recargara la cabeza contra su pecho y le colocara fuertemente las manos en la espalda. Hyde musitó un gracias antes de quedarse dormido. Pero Kaz no pudo conciliar el sueño esa noche, quería proteger a Hyde de todo resguardándole entre sus brazos.
-No! Yo no quiero volver ahí, estoy muy bien aquí contigo!!- Kaz se puso de pie, no quería escuchar de nuevo a Hyde diciendo cosas que sabía no eran verdad, ilusionándole en vano, haciéndole sentir el hombre mas feliz del mundo y al mismo tiempo el mas desdichado. Quería descansar de eso, de creerse importante y no ser nada
-No, sabes? No me molesta que estés aquí, por mi esta bien pero antes quiero que vayas y hables con Camui, ustedes tiene muchas cosas pendientes- le tomó del brazo y le levantó del sillón
-Si, pero no quiero hablarlo ahora, Kaz!!- el músico lo conducía a la puerta, jalando de él
-Vamos, ve y platícalo y cuando este todo bien puedes regresar, anda, anda
-Kaz! Me estas echando de tu casa?!
-Digamos que temporalmente, sí- cerró la puerta en la cara del vocalista. Este se puso a gritar como histérico golpeando la puerta e intentando abrirla, hasta que media hora después Kaz dejó de escuchar todo ese alboroto.
Hyde le había dado ya mas de cinco vueltas a la manzana de la casa que solía compartir con Gackt, entre que se decidía a bajar y no. No sabía que iba a decirle y pensaba que Gackt aun estaría lo bastante molesto así que ya se esperaba una discusión espectacular.
Finalmente estacionó poco convencido.
El auto de Gackt estaba aparcado por lo tanto concluyo que este estaba en casa. Entró sigilosamente muy nervioso, mientras se frotaba las manos.
Iba pensando como iniciar, quizás con un discúlpame. La sala estaba en calma, y la cocina y los pasillos cercanos también. Observó el reloj, no era tan temprano pero si Gackt había trabajado toda la noche como a veces hacía, entonces estaría durmiendo. Caminó hacia la habitación que por muchos años habían compartido y que, siempre había sido un lugar agradable para Hyde, un refugio. La puerta estaba entreabierta así que con un leve empujón se abrió por completo.
Su cuerpo se tensó, su quijada sobre todo se apretó hasta doler, sintió que el piso se le movía y tuvo que sostenerse de la pared para no caer como un bulto.
Ahí estaba él, en la cama que habían elegido juntos cuando Hyde se mudó a esa casa, en esa cama que para él era sagrada, su vínculo, sus momentos tranquilos y apasionados.
Ahí estaba Gackt, desnudo, cubriendo con su cuerpo el de otro hombre, besándole como Hyde pensaba solo podía besarle él, y ese hombre, esa persona que retozaba con Gackt sobre su cama, no era otro más que Masa
Fue este el primero en percatarse de su presencia y quien con una mirada desafiante le confirmó lo que Hyde temía, Camui y él eran amantes desde hace mucho tiempo.
-Hyde!- escuchó su nombre en voz del solista cuando daba la vuelta pesadamente en sus talones e intentaba escapar de la escena como un animal herido de muerte, casi arrastrando su cuerpo débil.
Gackt envuelto en una sabana le dio alcance en la sala tomándole del brazo
-Hyde yo lo siento, esto que viste paso porque yo estaba molesto por lo de Kaz! Pero - Gackt sintió que la sangre se le helaba y su corazón se desbordaba a sus pies, no había cosa más triste que ver a Hyde llorar.
Con ese rostro lindo, sus mejillas rojas humedecías en lágrimas, sus ojos de avellana tan cristalinos como dos piscinas profundas de agua limpia, mordiéndose el labio inferior como para contenerse, sollozando, incapaz de articular palabra.
Gackt le abrazó sintiéndose el ser más despreciable de la Tierra.
-Lo lamento H\tyde - el vocalista le apartó lento
-Gackt no quiero hablar contigo ahora por favor - en la sala apareció Masa usando la camisa de Camui y observando la escena con deleite. Hyde le miró de soslayo sintiendo como seguían cayendo pedazos de su corazón.
-Lo entiendo - como pudo Takarai se limpió las lágrimas y con la dignidad que aun le quedaba salió de la casa, subió a su auto intentando no pensar
Kaz terminaba de ordenar su departamento. Vivir con Hyde era el cielo y el infierno a la vez, a veces podía ser muy desorganizado. Cuando acomodaba la ropa pequeña del otro en el closet no pudo contenerse de acercarse una de las camisas de Hyde a su nariz y olerla. Le gustaba ese aroma dulce y fresco a la vez, cerró los ojos y se saboreó de nuevo aquel beso de menta y la calida sensación de recibirlo.
El timbre del interfon comenzó a sonar una y otra vez, como si alguien lo mantuviera oprimido, Kazuhito odiaba cuando la gente hacía eso; algo molesto levantó el auricular.
-Quien es?
-Kaz-chan - esa voz
-Hyde? Ya hablaste con Camui? Porque sino no te dejaré entrar, y no presiones el botón como loco!
-Kaz-chan - la voz sollozó lastimosamente
-Estas bien?
-Puedo entrar por favor?- el guitarrista se preocupó mucho y le dejó pasar. Esperó impaciente junto a la puerta a que Hyde abordara el elevador y llegara al departamento. Y si Gackt le había pegado? No se lo perdonaría, sacaría fuerzas de donde fuera pero no se lo perdonaría.
Entonces Hyde llamó a la puerta débilmente y Kaz abrió sin perder tiempo. Lo que vio le partió el corazón. Hasta ahora nunca había visto llorar a Takarai y la verdad es que no quería verlo de nuevo, era una escena muy conmovedora.
Parecía un niño pequeño extraviado de la mano de su madre, tan vulnerable, sus lágrimas cayendo en cascada, sus ojos ardiendo en tristeza, Kaz quiso preguntar que había pasado pero su cuerpo actuó antes que su boca, y sin pensarlo más se acercó para recibirlo en un fuerte abrazo. Le estrechó fuerte, lo suficientemente fuerte para hacerle sentir acompa
-Lo se
-Kaz se que te he dado tantas molestias ya, y estoy agradecido de que a pesar de todo me soportes, sin ti no se que haría
-No digas eso, nunca me darás molestias- le acarició el rostro tiernamente.
-Hoy cuando duerma podrías abrazarme fuerte, como hace un momento?- preguntó en un hilo de voz.
-Por supuesto - esa tarde pasó tan rápida, Hyde se fue directo a la cama y le pidió a Kaz que le dejara solo un rato, este aprovecho para intentar cocinar la comida favorita del vocalista.
Al anochecer se acostó junto a él, con la habitación en penumbras y en silencio. Los ojos de Hyde tristes y cristalinos destellaban ante él. Kaz no habló, no hubo necesidad, solo le abrazó, dejando que este recargara la cabeza contra su pecho y le colocara fuertemente las manos en la espalda. Hyde musitó un gracias antes de quedarse dormido. Pero Kaz no pudo conciliar el sueño esa noche, quería proteger a Hyde de todo resguardándole entre sus brazos.
Capítulo 14
Volvieron al trabajo en cuanto el primer single estuvo grabado y listo para su lanzamiento.
Sin embargo el vocalista se sentía mucho mejor ahora. Una semana en casa de Kaz le había servido para relajarse.
De alguna manera en la compañía del guitarrista sentía que podía ser él mismo. Incluso con Gackt, tenía que esforzarse para que éste lo amara. Siempre buscaba estar arreglado, ser interesante, buscaba la perfección.
Con Kaz simplemente era Hide sin maquillaje ni ropa lujosa, no las necesitaba, sabía que a Iwake no le importaban las apariencias, que él estaba contento con el hombre que estaba detrás de toda esa facha de músico ideal.
-Kaz-chan - susurró despacito para no interrumpir a J que hablaba y hablaba sin parar sobre el futuro funcionamiento de un posible myspace para Vamps. Kaz le miró intentando no desviar mucho su atención de la reunión.
-Que pasa?
-Nada solo quería escuchar tu voz - murmuró tomándole la mano bajo la mesa.
Todo el resto de la reunión, Hyde mantuvo sus dedos entrelazados a los de Kaz, escondidos bajo la mesa como si fuesen dos amantes prohibidos atados en un abrazo apasionado.
Kaz sentía que tarde o temprano su corazón escaparía de la jaula de su pecho y se refugiaría en manos de Hyde
Toda esa semana había sufrido de constantes ataques de taquicardia por culpa del vocalista.
Pero era imposible no creerlo, las acciones de Hyde le motivaban a pensar eso. Solía dormirse recargándole la cabeza en la espalda y, a veces, cuando seguramente creía que ya dormía, le acariciaba el brazo con la yema de los dedos, el cuerpo de Kaz naturalmente vibraba ante el contacto pero permanecía quieto porque no deseaba interrumpir sus emociones.
En algunas ocasiones, Kaz se sentía como si ya fueran pareja, porque aunque todo fuera muy ilusorio, ver a Hyde cocinarle, sentarse con él a escuchar su cd favorito, hacerle cosquillas para que dejara de husmear en sus objetos personales, observarle fumar en el balcón con ese semblante apacible y bello, toda esa recolección de pequeños detalles le daban a Kaz la apariencia de que era la persona que Hyde amaba aunque no fuera verdad. Después de todo, seguramente Hyde aun estaba enamorado de Gackt, tantos años no se acabarían por un beso, o si?
-Ah - era raro pero, no extrañaba para nada la casa de Gackt. Esta podía ser el triple de grande que el modesto departamento de Kaz, podría tener jardín, muebles enormes y elegantes, pero no tenía lo que Hyde realmente añoraba compañía.
Era fría muy a pesar de la hermosa chimenea.
En cambio, el departamento de su guitarrista era simple, un piso amplio de dos habitaciones, baño y un balcón con vista a los ventanales de los edificios de enfrente.
Quizás no era suntuoso el lugar pero a Hyde le relaja caminar en pijama con un hilo de saliva seca en la barbilla, comiendo cereal directamente de la caja por los pasillos, sin preocupaciones.
De repente sintió un fuerte golpe en el pecho, y no era más que el latir apresurado de su corazón Sacudió la cabeza, no podía ser que se estuviera enamorando de Kaz?! Con temor le miró en la sala, el músico hablaba por teléfono mientras el corazón de Hyde se desbocaba.
-Con Kasumi
-Y ella quien es?
-Una chica que me presentó Ken
-Para salir, obvio
-Por qué?
-Porque quiero salir con una chica? Bueno porque es muy natural no? Soy un hombre próximo a los 40, soltero.
-Atractivo
-Gracias, y normal. Así que- se encogió de hombros- saldré con Kasumi
-Tendrás entonces una cita.
-Así es
-Cuando?
-El sábado.
-Pero el sábado tenemos trabajo.
-Pero esto será de noche.
-Pero estaremos trabajando hasta tarde muy tarde! Además no necesitas salir con chicas! Las chicas son muy problemáticas y roban demasiado tiempo, no le veo la utilidad.
-Yo necesito salir con una.
-No! Por qué lo necesitas?!- Kaz se rió ante las facciones que adoptaba el rostro de Hyde cuando se encaprichaba.
-Parece que estuvieras celoso.
-Y lo estoy!
-Por eso me besaste?- ante la pregunta realmente inesperada, Hyde enmudeció. Tenía todas sus ideas hechas un desastre y también sus sentimientos. Abrió la boca sin estar seguro de que iba a decir, pero de pronto frunció el ceño y con su dedo índice tocó la nariz del otro
Kaz pensó que responder, pero él no solía ser un tipo mentiroso, así que no se le daba el inventar cualquier tontería para salir del problema, en su mente rondaba la única verdad. Pero como iba a decirle a Hyde "te besé porque la verdad es que tengo un par de años enamorado de ti".
Hyde no pudo excusarse más, tenían muchas cosas por hacer, como grabar el video promocional y asistir a entrevistas.
Sin embargo el vocalista se sentía mucho mejor ahora. Una semana en casa de Kaz le había servido para relajarse.
De alguna manera en la compañía del guitarrista sentía que podía ser él mismo. Incluso con Gackt, tenía que esforzarse para que éste lo amara. Siempre buscaba estar arreglado, ser interesante, buscaba la perfección.
Con Kaz simplemente era Hide sin maquillaje ni ropa lujosa, no las necesitaba, sabía que a Iwake no le importaban las apariencias, que él estaba contento con el hombre que estaba detrás de toda esa facha de músico ideal.
-Kaz-chan - susurró despacito para no interrumpir a J que hablaba y hablaba sin parar sobre el futuro funcionamiento de un posible myspace para Vamps. Kaz le miró intentando no desviar mucho su atención de la reunión.
-Que pasa?
-Nada solo quería escuchar tu voz - murmuró tomándole la mano bajo la mesa.
Todo el resto de la reunión, Hyde mantuvo sus dedos entrelazados a los de Kaz, escondidos bajo la mesa como si fuesen dos amantes prohibidos atados en un abrazo apasionado.
Kaz sentía que tarde o temprano su corazón escaparía de la jaula de su pecho y se refugiaría en manos de Hyde
Toda esa semana había sufrido de constantes ataques de taquicardia por culpa del vocalista.
Comenzaba a pensar que probablemente Hyde pudiera tener alguna clase de sentimientos hacia él, pero no quería ilusionarse. Sobretodo porque de alguna manera este aun estaba con Gackt a pesar de su distanciamiento.
Pero era imposible no creerlo, las acciones de Hyde le motivaban a pensar eso. Solía dormirse recargándole la cabeza en la espalda y, a veces, cuando seguramente creía que ya dormía, le acariciaba el brazo con la yema de los dedos, el cuerpo de Kaz naturalmente vibraba ante el contacto pero permanecía quieto porque no deseaba interrumpir sus emociones.
En algunas ocasiones, Kaz se sentía como si ya fueran pareja, porque aunque todo fuera muy ilusorio, ver a Hyde cocinarle, sentarse con él a escuchar su cd favorito, hacerle cosquillas para que dejara de husmear en sus objetos personales, observarle fumar en el balcón con ese semblante apacible y bello, toda esa recolección de pequeños detalles le daban a Kaz la apariencia de que era la persona que Hyde amaba aunque no fuera verdad. Después de todo, seguramente Hyde aun estaba enamorado de Gackt, tantos años no se acabarían por un beso, o si?
-Ah - era raro pero, no extrañaba para nada la casa de Gackt. Esta podía ser el triple de grande que el modesto departamento de Kaz, podría tener jardín, muebles enormes y elegantes, pero no tenía lo que Hyde realmente añoraba compañía.
Era fría muy a pesar de la hermosa chimenea.
En cambio, el departamento de su guitarrista era simple, un piso amplio de dos habitaciones, baño y un balcón con vista a los ventanales de los edificios de enfrente.
Quizás no era suntuoso el lugar pero a Hyde le relaja caminar en pijama con un hilo de saliva seca en la barbilla, comiendo cereal directamente de la caja por los pasillos, sin preocupaciones.
De repente sintió un fuerte golpe en el pecho, y no era más que el latir apresurado de su corazón Sacudió la cabeza, no podía ser que se estuviera enamorando de Kaz?! Con temor le miró en la sala, el músico hablaba por teléfono mientras el corazón de Hyde se desbocaba.
Él seguía amando a Camui, cierto? Claro que si
se suponía que si
Hyde ingresó a la sala apagando el cigarrillo contra uno de los ceniceros, Kaz recién colgaba el teléfono, así que se sentó a su lado en el sofá y le colocó los pies sobre las piernas, tomándole una mano para obligarlo a que la pusiera sobre su muslo pero Iwake entre risas la retiró.
-Y con quien hablabas?
Hyde ingresó a la sala apagando el cigarrillo contra uno de los ceniceros, Kaz recién colgaba el teléfono, así que se sentó a su lado en el sofá y le colocó los pies sobre las piernas, tomándole una mano para obligarlo a que la pusiera sobre su muslo pero Iwake entre risas la retiró.
-Y con quien hablabas?
-Con Kasumi
-Y ella quien es?
-Una chica que me presentó Ken
-Para?
-Para salir, obvio
-Por qué?
-Porque quiero salir con una chica? Bueno porque es muy natural no? Soy un hombre próximo a los 40, soltero.
-Atractivo
-Gracias, y normal. Así que- se encogió de hombros- saldré con Kasumi
-Tendrás entonces una cita.
-Así es
-Cuando?
-El sábado.
-Pero el sábado tenemos trabajo.
-Pero esto será de noche.
-Pero estaremos trabajando hasta tarde muy tarde! Además no necesitas salir con chicas! Las chicas son muy problemáticas y roban demasiado tiempo, no le veo la utilidad.
-Yo necesito salir con una.
-No! Por qué lo necesitas?!- Kaz se rió ante las facciones que adoptaba el rostro de Hyde cuando se encaprichaba.
-Parece que estuvieras celoso.
-Y lo estoy!
-Por eso me besaste?- ante la pregunta realmente inesperada, Hyde enmudeció. Tenía todas sus ideas hechas un desastre y también sus sentimientos. Abrió la boca sin estar seguro de que iba a decir, pero de pronto frunció el ceño y con su dedo índice tocó la nariz del otro
-Por qué me correspondiste el beso?! Ah?!- Kaz tartamudeó, tenían casi dos semanas bajo el mismo techo luego del incidente del beso y ninguno había tocado el tema. No había sido necesario.
Kaz pensó que responder, pero él no solía ser un tipo mentiroso, así que no se le daba el inventar cualquier tontería para salir del problema, en su mente rondaba la única verdad. Pero como iba a decirle a Hyde "te besé porque la verdad es que tengo un par de años enamorado de ti".
Capítulo 13
-Basta! Gackt déjalo ahora mismo! Déjalo!- como pudo apartó a Camui del otro quien sangraba profusamente doliéndose en el piso.
-Tu y yo tenemos una conversación pendiente - dijo el solista acomodándose el cabello y la ropa, aunque las costillas le dolían por como lo había pateado Kaz.
Hyde no contestó se mantuvo mirando al piso temblando ligeramente. Cuando Camui hubo abandonado el estudio Hyde se dejó caer de rodillas junto a Kaz
-Estas bien?- le preguntó pasándole una mano por el cabello.
-Sí estoy bien - dijo limpiándose la nariz con la mano, pero Hyde se inclinó y le limpió con una servilleta que había guardado en su pantalón a la hora del almuerzo.
-Gracias
-Porque?
-Por defenderme Kaz-chan
-Bueno yo
-Shsss, vamos a tu casa y te ayudo a detener esa sangre?- sonrió
-Vamos
Kaz se dio un baño mientras Hyde le preparaba la cena. Cuando salió de la ducha fue a buscarle a la cocina, se veía tan lindo en ese delantal blanco moviéndose de aquí hacia allá entre la estufa y el refrigerador.
Gackt era muy afortunado al tenerle, no entendía como desperdiciaba a una persona como Hyde
-Ah! Kaz-chan, te hizo sentir mejor la ducha?
-Si, me relajó los músculos
-Bien, siéntate, yo sirvo la cena- Kaz se sentía muy feliz, a pesar del dolor de los golpes de Gackt, tener a Hyde en su casa, preparándole la cena, hablándole con esa dulzura que el vocalista no hacía notar a todos
Se sentó y esperó pacientemente a Hyde le pusiera su plato de arroz y carne con verduras.
-Bueno, creo que eres una muy buena ama de casa- dijo en broma tomando un pedazo de carne con los palillos.
-Lo se! También puedo planchar y lavar aunque claro, no es algo que me guste hacer así que ni te emociones!
-Jajajaja- el guitarrista había pensado que luego del beso que se dieron la relación entre ellos estaría rara e incomoda. Pero nada de eso pasó, Hyde actuaba como si no hubiese ocurrido.
Kaz pensó que Hyde se iría a su hogar temprano para arreglar la situación con Gackt, pero no, a las 11 de la noche hizo palomas de maíz en el microondas y las llevó a la habitación, distendiendo la cama y acomodando los cojines
-Veamos una película!- le dio un platón con las palomitas y de entre su colección de películas se puso a buscar una. De repente se rió y mostrándole un dvd donde en la portada salían dos chicas de pechos grandes, dijo: veamos esta!!
-Oh vamos Hyde! Ese tipo de películas es para que las veas solo!
-Porque? Si la vemos juntos podrías intercambiar comentarios de cual tiene mejores tetas y eso.
-Basta! No pongas eso
-Ya! Esta bien, entonces esta!
Horas mas tarde Kaz había terminado durmiéndose, todo porque Hyde luego de la película dijo que no podía dormir y apagando todas las luces se puso a cantar en susurros The Cape of Storms, la voz suave y acompasada de Takarai, le hizo caer a un estado profundo de tranquilidad. Aunado a eso el hecho de que los dedos de Hyde se deslizaban por su mejilla herida
- But every dream has its time...to die...- cuando notó a Kaz finalmente dormido se hizo ovillo en un costado de la cama y dejó que todas sus lágrimas fluyeras.
Se sentía tan confundido, como si todos sus sentimientos fueran un remolino arrastrandole consigo. No entendía en primer caso porque había besado a Kaz y, el hecho de que este se lo hubiera correspondido le tenía aun más preocupado. Pensó que saldría a resumir el tema en la cena pero Kaz no dijo nada y el prefirió tampoco sacarlo a relucir. Quizás le había besado por pura curiosidad y pensar en eso de alguna manera le dolía a Hyde ¿Por qué sentía que le era necesario que Kaz le amara? Se tocó los labios recordando la calidez del beso la ternura impresa
Pero entonces asaltó su mente otro problema: Gackt.
Ahora con que cara se presentaría ante él? Le perdonaría? Tenía miedo de perderle y al mismo sentía que su relación estaba ya dañada, y sino hacían algo para mejorarla terminaría yéndose al caño.
Continuó despierto y llorando por un largo rato, aferrando las manos a las sabanas para no hacer ruido, hasta que cerca de las 4 de la mañana el sueño le venció.
Y ahí estaba el rockstar que miles de personas amaban. Aquel que bajo los reflectores de las cámaras parecía un ente perfecto, mitad hombre mitad mujer, coronado por el talento, la belleza y la gracia.
Kaz hizo cada cosa que Hyde le pidió, hasta le preparó el baño solo que el vocalista se rehúso a ducharse.
Llevaba horas frente al televisor jugando, el guitarrista no quería perturbarlo pero no podía dejar de preocuparse por toda la situación de trasfondo que había entre los dos o tres si contaba a Gackt.
Hyde ni mencionaba a Gackt ni sus intensiones por hablar con él, mantenía el celular apagado y usó su teléfono de casa para llamar a sus amigos más cercanos y decirles donde estaba.
Había incluso aplazado un par de compromisos de trabajo y parecía que se relajaba de maravilla en casa de Kaz.
Se levantaba tarde pero se dormía de madrugada, se mantenía viendo películas y manipulando al guitarrista para que las viera con él, o jugaran cartas, videojuegos y hasta lo hacía cantar con él bebiendo cerveza a altas horas de la noche.
En dos ocasiones el portero les pidió bajar el volumen de la música un martes a las 2 de la madrugada ya que Hyde se le había ocurrido comprar un disco de Marilyn Manson y ponerlo al máximo sonido.
-Ah muero de sueño - Jueves 4 de la tarde, Hyde salía de la pieza sin camisa, estirándose como un gato y tallándose los ojos. Kaz había pasado toda la mañana componiendo canciones, contestando algunas preguntas que varias revistas les habían enviado y atendiendo el teléfono que en su mayoría eran para Hyde, desde el productor, el manager, el staff, la gente del sello discográfico, Ken preguntando si ahora Hyde se acostaba con él, Tetsu recomendándole como hacerle salir de las depresiones, Yukkie preguntando por su bienestar, Sakura insistiendo que si era necesario ir y golpear a Gackt él le ayudaba.
-Terminar Donkey Kong
-Y luego?
-Probablemente bañarme, ver una película, cocinar algo para comer, leer lo que me falta del libro de Harry Potter y no se quizás luego retome Resident Evil.
-Ya veo y cuando en tus ocupados planes tienes pensado ir a tu casa y hablar con Gackt?- Hyde bebió el jugo de un solo trago y como un felino coqueto moviéndose ágilmente fue a sentarse a su lado en el sillón.
-Quieres que me vaya?...- hizo un puchero tan tierno que Kaz solo pudo sonreír
-No lo se, por eso te pregunto.
-No quiero!! Yo deseo quedarme aquí contigo
Kaz sintió que su corazón se desbocaba, y tragó saliva.
-De verdad?
-Sí contigo me siento seguro y sin preocupaciones- sonrió y Kaz no tuvo otra opción más que dejarle hacer lo que quisiera.
-Tu y yo tenemos una conversación pendiente - dijo el solista acomodándose el cabello y la ropa, aunque las costillas le dolían por como lo había pateado Kaz.
Hyde no contestó se mantuvo mirando al piso temblando ligeramente. Cuando Camui hubo abandonado el estudio Hyde se dejó caer de rodillas junto a Kaz
-Estas bien?- le preguntó pasándole una mano por el cabello.
-Sí estoy bien - dijo limpiándose la nariz con la mano, pero Hyde se inclinó y le limpió con una servilleta que había guardado en su pantalón a la hora del almuerzo.
-Gracias
-Porque?
-Por defenderme Kaz-chan
-Bueno yo
-Shsss, vamos a tu casa y te ayudo a detener esa sangre?- sonrió
-Vamos
Kaz se dio un baño mientras Hyde le preparaba la cena. Cuando salió de la ducha fue a buscarle a la cocina, se veía tan lindo en ese delantal blanco moviéndose de aquí hacia allá entre la estufa y el refrigerador.
Gackt era muy afortunado al tenerle, no entendía como desperdiciaba a una persona como Hyde
-Ah! Kaz-chan, te hizo sentir mejor la ducha?
-Si, me relajó los músculos
-Bien, siéntate, yo sirvo la cena- Kaz se sentía muy feliz, a pesar del dolor de los golpes de Gackt, tener a Hyde en su casa, preparándole la cena, hablándole con esa dulzura que el vocalista no hacía notar a todos
Se sentó y esperó pacientemente a Hyde le pusiera su plato de arroz y carne con verduras.
-Bueno, creo que eres una muy buena ama de casa- dijo en broma tomando un pedazo de carne con los palillos.
-Lo se! También puedo planchar y lavar aunque claro, no es algo que me guste hacer así que ni te emociones!
-Jajajaja- el guitarrista había pensado que luego del beso que se dieron la relación entre ellos estaría rara e incomoda. Pero nada de eso pasó, Hyde actuaba como si no hubiese ocurrido.
Kaz pensó que Hyde se iría a su hogar temprano para arreglar la situación con Gackt, pero no, a las 11 de la noche hizo palomas de maíz en el microondas y las llevó a la habitación, distendiendo la cama y acomodando los cojines
-Veamos una película!- le dio un platón con las palomitas y de entre su colección de películas se puso a buscar una. De repente se rió y mostrándole un dvd donde en la portada salían dos chicas de pechos grandes, dijo: veamos esta!!
-Oh vamos Hyde! Ese tipo de películas es para que las veas solo!
-Porque? Si la vemos juntos podrías intercambiar comentarios de cual tiene mejores tetas y eso.
-Basta! No pongas eso
-Ya! Esta bien, entonces esta!
Horas mas tarde Kaz había terminado durmiéndose, todo porque Hyde luego de la película dijo que no podía dormir y apagando todas las luces se puso a cantar en susurros The Cape of Storms, la voz suave y acompasada de Takarai, le hizo caer a un estado profundo de tranquilidad. Aunado a eso el hecho de que los dedos de Hyde se deslizaban por su mejilla herida
- But every dream has its time...to die...- cuando notó a Kaz finalmente dormido se hizo ovillo en un costado de la cama y dejó que todas sus lágrimas fluyeras.
Se sentía tan confundido, como si todos sus sentimientos fueran un remolino arrastrandole consigo. No entendía en primer caso porque había besado a Kaz y, el hecho de que este se lo hubiera correspondido le tenía aun más preocupado. Pensó que saldría a resumir el tema en la cena pero Kaz no dijo nada y el prefirió tampoco sacarlo a relucir. Quizás le había besado por pura curiosidad y pensar en eso de alguna manera le dolía a Hyde ¿Por qué sentía que le era necesario que Kaz le amara? Se tocó los labios recordando la calidez del beso la ternura impresa
Pero entonces asaltó su mente otro problema: Gackt.
Ahora con que cara se presentaría ante él? Le perdonaría? Tenía miedo de perderle y al mismo sentía que su relación estaba ya dañada, y sino hacían algo para mejorarla terminaría yéndose al caño.
Continuó despierto y llorando por un largo rato, aferrando las manos a las sabanas para no hacer ruido, hasta que cerca de las 4 de la mañana el sueño le venció.
Y ahí estaba el rockstar que miles de personas amaban. Aquel que bajo los reflectores de las cámaras parecía un ente perfecto, mitad hombre mitad mujer, coronado por el talento, la belleza y la gracia.
Y ahí estaba él, sentado en pants sobre su sofá, con el cabello despeinado, la almohada aun marcada en la mejilla, taza de café a la mano, cigarro y jugando Resident Evil como endemoniado.
Se había levanto a eso de las 3 de la tarde, pidiéndole le hiciera el desayuno mientras el continuaba enredado en las sabanas descansando los ojos.
Se había levanto a eso de las 3 de la tarde, pidiéndole le hiciera el desayuno mientras el continuaba enredado en las sabanas descansando los ojos.
Kaz hizo cada cosa que Hyde le pidió, hasta le preparó el baño solo que el vocalista se rehúso a ducharse.
Llevaba horas frente al televisor jugando, el guitarrista no quería perturbarlo pero no podía dejar de preocuparse por toda la situación de trasfondo que había entre los dos o tres si contaba a Gackt.
Un día estuvo bien, dos le parecieron raros, pero tres
tres días de tener a Hyde en su casa, como si nada, ya era exagerada rareza.
Hyde ni mencionaba a Gackt ni sus intensiones por hablar con él, mantenía el celular apagado y usó su teléfono de casa para llamar a sus amigos más cercanos y decirles donde estaba.
Había incluso aplazado un par de compromisos de trabajo y parecía que se relajaba de maravilla en casa de Kaz.
Se levantaba tarde pero se dormía de madrugada, se mantenía viendo películas y manipulando al guitarrista para que las viera con él, o jugaran cartas, videojuegos y hasta lo hacía cantar con él bebiendo cerveza a altas horas de la noche.
En dos ocasiones el portero les pidió bajar el volumen de la música un martes a las 2 de la madrugada ya que Hyde se le había ocurrido comprar un disco de Marilyn Manson y ponerlo al máximo sonido.
-Ah muero de sueño - Jueves 4 de la tarde, Hyde salía de la pieza sin camisa, estirándose como un gato y tallándose los ojos. Kaz había pasado toda la mañana componiendo canciones, contestando algunas preguntas que varias revistas les habían enviado y atendiendo el teléfono que en su mayoría eran para Hyde, desde el productor, el manager, el staff, la gente del sello discográfico, Ken preguntando si ahora Hyde se acostaba con él, Tetsu recomendándole como hacerle salir de las depresiones, Yukkie preguntando por su bienestar, Sakura insistiendo que si era necesario ir y golpear a Gackt él le ayudaba.
-Hyde
que harás hoy?- le preguntó en cuanto vio como se desperezaba y se servía un vaso de jugo.
-Terminar Donkey Kong
-Y luego?
-Probablemente bañarme, ver una película, cocinar algo para comer, leer lo que me falta del libro de Harry Potter y no se quizás luego retome Resident Evil.
-Ya veo y cuando en tus ocupados planes tienes pensado ir a tu casa y hablar con Gackt?- Hyde bebió el jugo de un solo trago y como un felino coqueto moviéndose ágilmente fue a sentarse a su lado en el sillón.
-Quieres que me vaya?...- hizo un puchero tan tierno que Kaz solo pudo sonreír
-No lo se, por eso te pregunto.
-No quiero!! Yo deseo quedarme aquí contigo
Kaz sintió que su corazón se desbocaba, y tragó saliva.
-De verdad?
-Sí contigo me siento seguro y sin preocupaciones- sonrió y Kaz no tuvo otra opción más que dejarle hacer lo que quisiera.
Capítulo 12
Lloraba
lloraba como si le hubiesen arrancado un pedazo enorme de corazón y su sangre se derramara a la par que sus sentimientos.
Manejo hasta más tarde de la media noche bajo las luces de neón de Tokyo, no sabía a donde ir. No quería incomodar a sus amigos pero se moría de ganas por sentirse abrazado; que alguien le dijera que todo estaría bien.
Cuando menos lo esperó ya estaba fuera del departamento de Kaz. Veía las luces del living aun encendidas. Se limpió un poco las lágrimas y abrió la puerta del auto.
No podía no quería incomodarlo con sus tonterías se encerró de nuevo en su vehículo y lloró sobre el volante hasta que no pudo más y solo quedaron los sollozos.
Hyde llegó a casa hasta el amanecer. Se sentía cansado de todo; Gackt estaba tocando el piano sin camisa y con el ventanal abierto, cuando escuchó a Takarai entrar detuvo su melodía y le observó.
El vocalista pasó de largo directo a la pieza y se dejó caer en la cama como si el cuerpo le pesara.
De repente sintió a su amante recostarse a su lado y abrazarle contra su pecho. Hyde intentó huir de sus manos, pero en realidad ni siquiera se movió, se dejó envolver por la fría piel de Gackt y su aroma a jabón.
-Hyde, discúlpame por como te trate ayer te amo te amo y prometo no volver a ser así contigo, me perdonas?
-Gackt aunque sea una mentira pero por favor dime que no me engañas -
Los siguientes días el estado de ánimo de Hyde se volvió muy inestable. Últimamente recibía llamadas a su departamento y siempre le preguntaban por Camui, era la voz de un chico que siempre llamaba de un número distinto. Lo más raro es que solía hacerlo en horarios en que Gackt no se encontraba, era como si ese chico supiera a que horas podía y no podía encontrar al solista.
Eso mataba lentamente a Hyde, quien había decidido confiar en su pareja y creer ciegamente que él sería incapaz de engañarlo. Pero algo en su interior no terminaba de convencerse, aunado a eso, tenía la incógnita sobre si Kaz pudiera tener alguna clase de sentimientos por él más allá de la amistad.
El músico era el mismo de siempre, jovial y amable, y le trataba como solía hacerlo, quizás era que ahora Hyde estaba al tanto de cada movimiento.
-Bien, terminamos por hoy- anunció el manager y todos comenzaron a salir del estudio, menos Hyde que se sentó en el sillón y se encendió un cigarro. A la distancia, Kaz guardaba su guitarra, de pronto se puso de pie y le arrojó a Hyde un almohadón del otro sofá directo a la cara. Hyde maldijo porque al intentar esquivar el golpe se quemó con su cigarro.
-jajajaja te lo mereces!!
-Que malo eres Kaz!!!- dejando su cigarro colgando del cenicero tomó otro de los cojines y se fue directo contra el guitarrista muy decidido a golpearlo, pero su pie se atoró con un cable y trastabilló de tal forma que su cuerpo fue a dar contra el pecho de Kaz y este no pudo sostenerle.
Ambos cayeron al piso, Hyde sobre Kaz. Sus rostros a una distancia tan corta que el guitarrista percibía el cálido aliento de Hyde, sentía que el corazón iba a explotarle. Cuando intentó decir algo coherente y retirar a Takarai de si, observó como este le miraba los labios, acaso planeaba besarlo?...
No terminó ni de pensar en lo que Hyde haría cuando este ya estaba uniendo sus labios contra los suyos, Kaz intentó no corresponderle, apretando los ojos y encajando los dedos sobre la alfombra, pero su boca se guió sola, y tomó la de Hyde en un beso húmedo y ansioso.
Kaz se enamoró de cada rincón de la boca del cantante, era tan suave su interior y su lengua tenía ese sabor a cigarro y menta, los labios pequeños se derretían contra los suyos, la saliva de ambos mezclándose, no pudo contenerse y le colocó una mano en la nuca para no dejarle ir.
Hyde era un experto besando, Kaz no quiso pensar en ese instante donde lo aprendió, pero por la forma tan devoradora e intensa en que Takarai le mordía los labios y le acariciaba la lengua sabía que nunca recibiría un beso mejor que ese.
Estaban ambos músicos tan absortos en el beso que no notaron cuando la puerta del estudio se abrió
-Que mierda es esto!!!!- y ahí con cara de que podía matar a quien fuera, estaba Gackt.
Hyde abrió los ojos sorprendido y se levantó enseguida, Kaz permaneció como estático mitad sorprendido aun por el beso y mitad por la presencia de la pareja de Takarai.
El alto solista caminó furico hacia su pequeño Hyde y le tomó del brazo bruscamente.
-Te crees tan santo para decir que te engaño cuando tu eres la puta que se acuesta con su guitarrista?!!- lo zarandeó con fuerza.
-No! Es que esto no .
Manejo hasta más tarde de la media noche bajo las luces de neón de Tokyo, no sabía a donde ir. No quería incomodar a sus amigos pero se moría de ganas por sentirse abrazado; que alguien le dijera que todo estaría bien.
Cuando menos lo esperó ya estaba fuera del departamento de Kaz. Veía las luces del living aun encendidas. Se limpió un poco las lágrimas y abrió la puerta del auto.
No podía no quería incomodarlo con sus tonterías se encerró de nuevo en su vehículo y lloró sobre el volante hasta que no pudo más y solo quedaron los sollozos.
Hyde llegó a casa hasta el amanecer. Se sentía cansado de todo; Gackt estaba tocando el piano sin camisa y con el ventanal abierto, cuando escuchó a Takarai entrar detuvo su melodía y le observó.
El vocalista pasó de largo directo a la pieza y se dejó caer en la cama como si el cuerpo le pesara.
De repente sintió a su amante recostarse a su lado y abrazarle contra su pecho. Hyde intentó huir de sus manos, pero en realidad ni siquiera se movió, se dejó envolver por la fría piel de Gackt y su aroma a jabón.
-Hyde, discúlpame por como te trate ayer te amo te amo y prometo no volver a ser así contigo, me perdonas?
-Gackt aunque sea una mentira pero por favor dime que no me engañas -
Los siguientes días el estado de ánimo de Hyde se volvió muy inestable. Últimamente recibía llamadas a su departamento y siempre le preguntaban por Camui, era la voz de un chico que siempre llamaba de un número distinto. Lo más raro es que solía hacerlo en horarios en que Gackt no se encontraba, era como si ese chico supiera a que horas podía y no podía encontrar al solista.
Eso mataba lentamente a Hyde, quien había decidido confiar en su pareja y creer ciegamente que él sería incapaz de engañarlo. Pero algo en su interior no terminaba de convencerse, aunado a eso, tenía la incógnita sobre si Kaz pudiera tener alguna clase de sentimientos por él más allá de la amistad.
El músico era el mismo de siempre, jovial y amable, y le trataba como solía hacerlo, quizás era que ahora Hyde estaba al tanto de cada movimiento.
-Bien, terminamos por hoy- anunció el manager y todos comenzaron a salir del estudio, menos Hyde que se sentó en el sillón y se encendió un cigarro. A la distancia, Kaz guardaba su guitarra, de pronto se puso de pie y le arrojó a Hyde un almohadón del otro sofá directo a la cara. Hyde maldijo porque al intentar esquivar el golpe se quemó con su cigarro.
-jajajaja te lo mereces!!
-Que malo eres Kaz!!!- dejando su cigarro colgando del cenicero tomó otro de los cojines y se fue directo contra el guitarrista muy decidido a golpearlo, pero su pie se atoró con un cable y trastabilló de tal forma que su cuerpo fue a dar contra el pecho de Kaz y este no pudo sostenerle.
Ambos cayeron al piso, Hyde sobre Kaz. Sus rostros a una distancia tan corta que el guitarrista percibía el cálido aliento de Hyde, sentía que el corazón iba a explotarle. Cuando intentó decir algo coherente y retirar a Takarai de si, observó como este le miraba los labios, acaso planeaba besarlo?...
No terminó ni de pensar en lo que Hyde haría cuando este ya estaba uniendo sus labios contra los suyos, Kaz intentó no corresponderle, apretando los ojos y encajando los dedos sobre la alfombra, pero su boca se guió sola, y tomó la de Hyde en un beso húmedo y ansioso.
Kaz se enamoró de cada rincón de la boca del cantante, era tan suave su interior y su lengua tenía ese sabor a cigarro y menta, los labios pequeños se derretían contra los suyos, la saliva de ambos mezclándose, no pudo contenerse y le colocó una mano en la nuca para no dejarle ir.
Hyde era un experto besando, Kaz no quiso pensar en ese instante donde lo aprendió, pero por la forma tan devoradora e intensa en que Takarai le mordía los labios y le acariciaba la lengua sabía que nunca recibiría un beso mejor que ese.
Estaban ambos músicos tan absortos en el beso que no notaron cuando la puerta del estudio se abrió
-Que mierda es esto!!!!- y ahí con cara de que podía matar a quien fuera, estaba Gackt.
Hyde abrió los ojos sorprendido y se levantó enseguida, Kaz permaneció como estático mitad sorprendido aun por el beso y mitad por la presencia de la pareja de Takarai.
El alto solista caminó furico hacia su pequeño Hyde y le tomó del brazo bruscamente.
-Te crees tan santo para decir que te engaño cuando tu eres la puta que se acuesta con su guitarrista?!!- lo zarandeó con fuerza.
-No! Es que esto no .
-Cállate!!- subió el brazo bastante molesto en un acto que demostraba sus intensiones de pegarle, y Hyde cerró los ojos esperando en cualquier momento sentir la bofetada. Pero ese momento no llegó, Gackt se quedó inmóvil.
Camui se descontroló al inicio pero en minutos se repuso y se abalanzó sobre Kaz derrumbándole.
Hyde gritó espantado por la escena, ambos hombres se golpeaban con bastante fuerza pero de alguna manera Camui estaba llevando la ventaja e hizo sangrar a Kaz de la nariz, ahí Hyde no pudo soportarlo más.
De repente, Kaz se levantó del piso y empujó a Camui lejos de Hyde. Retomó el ataque sin perder tiempo y le asestó un puñetazo directo en la cara. Estaba enojado, porque el amaba a Hyde y nunca permitiría que nadie le hiciera daño.
Camui se descontroló al inicio pero en minutos se repuso y se abalanzó sobre Kaz derrumbándole.
Hyde gritó espantado por la escena, ambos hombres se golpeaban con bastante fuerza pero de alguna manera Camui estaba llevando la ventaja e hizo sangrar a Kaz de la nariz, ahí Hyde no pudo soportarlo más.
Capítulo 11
Todos le habían creído desaparecido, pero se equivocaron. Masa había vuelto a la vida de Camui hace varios meses atrás.
Todo comenzó cuando Gackt necesitó un reemplazo de guitarrista, para unas grabaciones, a pesar de que entre ellos la relación no había terminado de la mejor manera, Masa fue al estudio y se ofreció ayudar.
Gackt dudó al inicio. Él y el guitarrista habían tenido su historia de amor en el pasado, que se vio interrumpida cuando conoció a Hyde y se enamoró perdidamente de él, pero de alguna manera, la presencia de Masa avivó las llamas apagadas entre ellos. Y una tarde ya estaban besándose.
Camui nunca se imaginó siéndole infiel a Hyde, a quien amaba y hasta compartían casa, pero la tentación había sido grande y cayó con facilidad. Ahora llevaba una doble vida de la que se avergonzaba, pero no sabía como salir de la situación.
Masa elegía algunas camisas de colores cuando el celular de Gackt sonó inesperadamente. Era su manager. Tras el saludo y la cortesía, le dio algunas indicaciones de trabajo y luego, cambió de tema
-Ah! Gackt, hace unos días vi a Hyde.
-Si? Donde?
-Lo encontré desayunando en un restaurant, con otro chico - se produjo un largo silencio que el manager rompió con una risita- se veía muy alegre, sonriendo y jugueteando con el hombre.
-Claro que si, era Kazuhito Iwake
-Ya veo escucha, cancelaré algunos compromisos aquí, creo que es necesaria mi presencia en Japón.
Masa se enfureció cuando le dijo que debía regresar a su país, él sabía que era por Hyde, y la verdad es que Hyde ya le tenía harto. Le había quitado una vez a su persona amada pero no dos veces en esta ocasión no sería así
Hyde intentaba prestar atención a la reunión. Hablaban sobre las promociones y la grabación del video de Love Addict, parte de su mente estaba al tanto de lo que decían pero su otra mitad volaba sobre la idea de que Kaz pudiera estar enamorado de él
Y de repente la puerta de la sala de reuniones se abrió como si nada y se escuchó a la recepcionista pedirle al invitado sorpresa que no interrumpiera así.
-Gacchan!- los ojos de Hyde se iluminaron cuando vio entrar a Camui, este caminó directo hacia él ignorando a todos los presentes, sujeto al vocalista del brazo y le puso de pie para sin pudor alguno robarle un acalorado beso ante la mirada de sorpresa de todos. Kaz inclinó la cabeza concentrando su mirada en los papeles entre sus manos, su corazón de nuevo dolía como si lo partieran en dos.
Hyde intentó seguir la reunión pero Gackt educadamente en esta ocasión pidió permiso al manager y al resto para secuestrarles por el resto del día a Takarai, argumentando que tenían semanas sin verse y necesitaban un tiempo a solas.
-Gacchan y a donde me vas a llevar?- Camui tomaba una ducha mientras Hyde le esperaba en la habitación viendo televisión. Le había dicho que tendrían una cena romántica, como hacia mucho que no las tenían, y a Hyde le entusiasmo la idea.
-Es una sorpresa!- gritó desde el baño.
-Que ansias!! Termina rápido!!- el celular del alto cantante comenzó a sonar y Hyde lo observó tentadoramente, deseaba verificar el mensaje que acaba de llegarle, probablemente sería algo de trabajo pero aun así se moría de ganas por verlo. Riéndose decidió cometer la travesura de tomar el celular y leer el mensaje para su Camui, después de todo, sabía que a Gackt no se molestaría con él y seguro hasta le daría gracia.
Amor, que lastima que hayamos tenido que volver antes
El celular cayó a los pies descalzos del vocalista. El número no era conocido, pero no tenía nombre para identificarlo. ¿Acaso un amante? No, Gackt no podía engañarlo. Era verdad que había llegado a pensar en más de una ocasión que así era, por su continua ausencia, pero él siempre lograba convencerlo de lo contrario.
Recogió el celular y decidió pensar que era un número equivocado
-Ah! Te llego un mensaje pero creo que es equivocado, te digo lo que dice?- hecho una furia, Camui avanzó hacia él con grandes zancadas y le arrebató el aparato.
-No tienes porque revisar mis mensajes!!
-Nada! El que seamos pareja no significa que tengas en derecho de invadir mi privacidad!!
-Gackt tampoco es para que te pongas histérico! Bueno, discúlpame! La verdad no creí que te molestaría...
-A ti te gustaría que leyera tus mensajes?
-Si, porque no escondo nada que no puedas leer.
-Me quedó claro- se acercó al closet y sacó su chaqueta colocándosela enseguida
-A donde vas?
-Honestamente, no lo sé. Solo quiero estar lejos de ti.
-Hyde perdóname, mira no te enojes y vamos a cenar, amor- Hyde se rió histéricamente con los ojos llenos de fuego y lágrimas.
Sus propias lágrimas le ardieron cuando rodaron por las mejillas y rozaron los labios.
-Gackt, basta, primero te vas no sé por cuanto tiempo, regresas, me gritas y quieres que cuando tu lo desees ¿Yo este dispuesto a lo que sea? Pues no, las cosas no serán cuando tu digas! Así que por mi acuéstate con medio Japón, ¡Me da igual ya! ¡Y vete a la mierda!- Hyde salió corriendo hacia la puerta, el otro intentó detenerlo pero no pudo ir más allá de la puerta porque se encontraba en bata.
Todo comenzó cuando Gackt necesitó un reemplazo de guitarrista, para unas grabaciones, a pesar de que entre ellos la relación no había terminado de la mejor manera, Masa fue al estudio y se ofreció ayudar.
Gackt dudó al inicio. Él y el guitarrista habían tenido su historia de amor en el pasado, que se vio interrumpida cuando conoció a Hyde y se enamoró perdidamente de él, pero de alguna manera, la presencia de Masa avivó las llamas apagadas entre ellos. Y una tarde ya estaban besándose.
Camui nunca se imaginó siéndole infiel a Hyde, a quien amaba y hasta compartían casa, pero la tentación había sido grande y cayó con facilidad. Ahora llevaba una doble vida de la que se avergonzaba, pero no sabía como salir de la situación.
Masa elegía algunas camisas de colores cuando el celular de Gackt sonó inesperadamente. Era su manager. Tras el saludo y la cortesía, le dio algunas indicaciones de trabajo y luego, cambió de tema
-Ah! Gackt, hace unos días vi a Hyde.
-Si? Donde?
-Lo encontré desayunando en un restaurant, con otro chico - se produjo un largo silencio que el manager rompió con una risita- se veía muy alegre, sonriendo y jugueteando con el hombre.
-Reconociste al hombre?
-Claro que si, era Kazuhito Iwake
-Ya veo escucha, cancelaré algunos compromisos aquí, creo que es necesaria mi presencia en Japón.
Masa se enfureció cuando le dijo que debía regresar a su país, él sabía que era por Hyde, y la verdad es que Hyde ya le tenía harto. Le había quitado una vez a su persona amada pero no dos veces en esta ocasión no sería así
Hyde intentaba prestar atención a la reunión. Hablaban sobre las promociones y la grabación del video de Love Addict, parte de su mente estaba al tanto de lo que decían pero su otra mitad volaba sobre la idea de que Kaz pudiera estar enamorado de él
Y de repente la puerta de la sala de reuniones se abrió como si nada y se escuchó a la recepcionista pedirle al invitado sorpresa que no interrumpiera así.
-Gacchan!- los ojos de Hyde se iluminaron cuando vio entrar a Camui, este caminó directo hacia él ignorando a todos los presentes, sujeto al vocalista del brazo y le puso de pie para sin pudor alguno robarle un acalorado beso ante la mirada de sorpresa de todos. Kaz inclinó la cabeza concentrando su mirada en los papeles entre sus manos, su corazón de nuevo dolía como si lo partieran en dos.
Hyde intentó seguir la reunión pero Gackt educadamente en esta ocasión pidió permiso al manager y al resto para secuestrarles por el resto del día a Takarai, argumentando que tenían semanas sin verse y necesitaban un tiempo a solas.
-Gacchan y a donde me vas a llevar?- Camui tomaba una ducha mientras Hyde le esperaba en la habitación viendo televisión. Le había dicho que tendrían una cena romántica, como hacia mucho que no las tenían, y a Hyde le entusiasmo la idea.
-Es una sorpresa!- gritó desde el baño.
-Que ansias!! Termina rápido!!- el celular del alto cantante comenzó a sonar y Hyde lo observó tentadoramente, deseaba verificar el mensaje que acaba de llegarle, probablemente sería algo de trabajo pero aun así se moría de ganas por verlo. Riéndose decidió cometer la travesura de tomar el celular y leer el mensaje para su Camui, después de todo, sabía que a Gackt no se molestaría con él y seguro hasta le daría gracia.
Amor, que lastima que hayamos tenido que volver antes
El celular cayó a los pies descalzos del vocalista. El número no era conocido, pero no tenía nombre para identificarlo. ¿Acaso un amante? No, Gackt no podía engañarlo. Era verdad que había llegado a pensar en más de una ocasión que así era, por su continua ausencia, pero él siempre lograba convencerlo de lo contrario.
Recogió el celular y decidió pensar que era un número equivocado
-Que haces?- salió el alto cantante de la ducha goteando agua.
-Ah! Te llego un mensaje pero creo que es equivocado, te digo lo que dice?- hecho una furia, Camui avanzó hacia él con grandes zancadas y le arrebató el aparato.
-No tienes porque revisar mis mensajes!!
-Pero
yo
-Nada! El que seamos pareja no significa que tengas en derecho de invadir mi privacidad!!
-Gackt tampoco es para que te pongas histérico! Bueno, discúlpame! La verdad no creí que te molestaría...
-A ti te gustaría que leyera tus mensajes?
-Si, porque no escondo nada que no puedas leer.
-No importa! Solo no vuelvas a hacerlo, quieres?
-Me quedó claro- se acercó al closet y sacó su chaqueta colocándosela enseguida
-A donde vas?
-Honestamente, no lo sé. Solo quiero estar lejos de ti.
-Hyde perdóname, mira no te enojes y vamos a cenar, amor- Hyde se rió histéricamente con los ojos llenos de fuego y lágrimas.
Sus propias lágrimas le ardieron cuando rodaron por las mejillas y rozaron los labios.
-Gackt, basta, primero te vas no sé por cuanto tiempo, regresas, me gritas y quieres que cuando tu lo desees ¿Yo este dispuesto a lo que sea? Pues no, las cosas no serán cuando tu digas! Así que por mi acuéstate con medio Japón, ¡Me da igual ya! ¡Y vete a la mierda!- Hyde salió corriendo hacia la puerta, el otro intentó detenerlo pero no pudo ir más allá de la puerta porque se encontraba en bata.
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